dimarts, 3 de juny del 2008

NO ESTAMOS LOCOS

Los alpinistas, no estamos locos, y esto lo digo por que cuando alguien me pregunta: "y tu que aficiones tienes?", yo le respondo: "hago alpinismo", pues bien en ese justo instante, tras responder, la cara de la otra persona queda totalmente desencajada, y te mira como si fueses un lunático, un loco de aquellos que han de permanecer atados a una correa por si las moscas se escapan.
sin envargo, y a mi parecer, una de dos, o se nos considera totalmente normales, como aquel al que le da por la pintura, la música u otra cosa (sea dicho, cualquier afición es respetable siempre que no hagan daño a terceros), o que sigan su camino y pasen de nosotros, por que creo que ya esta bien de que la mayoría de la gente, nos trate como colgados.
Otra cosa que se ha de mencionar, es que el verdadero alpinista, el que arriesga su vida, no practica una afición o hobbie o como se quiera llamar, el alpinista vive la montaña, la ama. yo soy alpinista, y puedo asegurar, que yo no practico una afición, yo sueño, vivo una ilusión, la montaña es mi vida y mi gran amor, nadie puede reemplazar en mi corazón al alpinismo.
otro caso que normalmente va unido al primero, es que te pregunten (esta es la parte mas repugnante de todas): pero tu para que necesitas subir montañas para que te reconozcan, no podrías ser mas normal?. eso duele en el corazón, eso carga de rabia a todo aquel alpinista que lo oiga. pero que leches de reconocimiento ni que niño muerto, que no lo hacemos por reconocimientos, ni por ser famosos, ni por nada de eso que la actual sociedad vive (dinero, famosos, programas del corazon...etc...), lo hacemos por amor, por que amamos a las montañas, la naturaleza, y es más, cuando uno sube un pico sea cual sea, grande o pequeño, y cuando lo sube, no por reconocimiento ni nada de eso, cuando lo sube por amor, se descubre a si mismo un poco más, es decir, cuando estas subiendo a una cumbre, hacen falta dos cosas: técnica y fuerza espiritual. si tienes esa fuerza todas las demás cosas sobran, y es que durante el transcurso de una ascensión, pasan por tu cabeza mil cosas, desde me voy a matar, hasta ya estoy llegando, y lo que te da fuerzas para subir, es tu mente, si tu mente esta aquí abajo, es decir, en la sociedad del consumismo, etc... tu no tiene pelotas a subir, bien, pues si tu mente y tu corazón son puros y no necesitan de tanta milonga para vivir, entonces tienes la posibilidad de llegar arriba.
un alpinista, depende principalmente de su mente, la mente te da la fuerza y el valor de superar obstáculos, pero claro, hoy en día se compra todo con dinero, hasta subir al Everest, pues bien, aquellos que lo han comprado, aquellos no han subido, sino que les han subido, uno no llega arriba por su dinero, si no por su corazón, cada vez que un autentico alpinista logra una ascensión siente un bienestar inmenso, un bienestar y una sensación de euforia que siempre permanecerá en la memoria, y cada vez que lo siente, se vuelve mejor persona,baja mas fuerte mentalmente, y como he dicho antes, esto no se puede comprar, si no luchas por ello no hay recompensa.
todo aquel alpinista que lo lea(solo los auténticos) sabrán de que les hablo, para el resto de mortales, mejor no intentéis entenderlo, puesto que esto no se entiende hasta que se vive en primera persona.

este articulo, lo he escrito con una única intención, que la gente, esas personas que hacen esas preguntas, sigan su camino y pasen de nosotros, o por lo menos de mi, nunca ninguna de esas personas me va a enamorar tanto como la diosa naturaleza.